Muerte súbita cardiaca

Definición:

Conceptualmente se han utilizado diversas definiciones de muerte súbita cardiaca:

  1. Aquella que acontece de forma natural, inesperada e instantánea o dentro de la primera hora de iniciados los síntomas premonitorios.
  2. Muerte debida a causa o mecanismo cardíaco primario que se produce en las 24 horas siguientes desde el comienzo de la enfermedad aguda en una persona libre de enfermedad cardiaca o ligeramente sintomática.
  3. Muerte natural debida a causas cardíacas, que se produce instantáneamente o hasta una hora después de iniciados los síntomas, en un paciente que pueda o no tener conocimiento de sufrir una cardiopatía, pero que el tiempo y la forma de suceder son inesperadas.

Así, destacarían como características en todas estas definiciones que se trata de una muerte:

  • Natural: no producida por ninguna violencia externa
  • Inesperada: aunque pueda afectar a individuos totalmente sanos como a cardiópatas conocidos
  • Rápida: ocurre de forma instantánea o en un breve plazo de tiempo. Es este el punto más controvertido y conviene diferenciar entre pródromos y síntomas premonitorios:
    • Pródromos : puede darse unos días o semanas antes : aparición de síntomas de cardiopatía o agravación de la misma.
    • Síntomas premonitorios: expresión de descompensación aguda y que están estrechamente relacionados con la muerte (estos son los que deben tomarse como referencia de la muerte súbita) .

En relación con el factor tiempo se ha llegado a establecer subgrupos:

  1. Instantánea
  2. Muy súbita (menos de 1h)
  3. Súbita (1h-24h)
  4. No súbita (más de 24 h)

Epidemiología:

La incidencia varía ampliamente en los diversos países y se encuentra en relación con la prevalencia de enfermedad arterial coronaria, sin embargo, concurren además otros muchos parámetros. Por otra parte conviene considerar que es la forma más frecuente de muerte de origen cardíaco. En USA se estiman de 1.200-1.400 casos diarios, lo que supone un total de unos 400.000 anuales.

Se está observando una disminución de esta frecuencia que se relaciona con la disminución de los factores de riesgo, la creación de Unidades Coronarias y el entrenamiento de equipos de reanimación.

  1. Edad: se han observado dos picos:
    1. Desde el nacimiento hasta los 6 meses: Síndrome de la muerte súbita infantil.
    2. De los 45 a los 75 años. Corre paralela a la cardiopatía isquémica, siendo más frecuente en los más jóvenes; en los mayores es más habitual el desarrollo de una insuficiencia cardiaca.
  2. Sexo: más frecuente en varones. En las mujeres se aprecia la existencia de un factor hormonal que ejercería una función protectora relacionado con la menarquia (de hecho las mujeres menopáusicas con factores de riesgo se tratan con estrógenos).
  3. Herencia: Cuenta como factor predisponente. Por ejemplo el Síndrome de QT largo (cromosomapatía de 11, 7, 3) y en 2/3 de los casos se acompaña de conducto membranoso anormal con alteraciones en la repolarización.
  4. Raza:  También se ha visto cierta relación con la raza: aumenta en raza negra, pero la diferencia disminuye con la edad.
  5. Calidad de las aguas: las aguas duras ejercerían un papel protector. Se ha relacionado también con la presentación de situaciones de hipomagnesemias: sensibilidad de la musculatura lisa vascular.
  6. Con situaciones de estrés: liberación de catecolaminas, lipolísis, liberación de ácidos grasos que se unen al Mg (la disminución de magnesio conlleva una inestabilidad eléctrica).

Factores de riesgo:

  1. Hipertensión: aumento claro del riesgo. (EM sistólica genera un riesgo 4,2 veces mayor; diastólica el riesgo es 2,6 veces mayor).
  2. Dislipemias : Hipercolesterolemia (EM >250 mg/dl 3,7 veces mayor).
  3. Tabaquismo: Mayor efecto nocivo en varones que en mujeres. Se relaciona con agregación plaquetaria, irritabilidad miocárdica, taquicardia, deficiente transporte de oxígeno y aterogénesis (EM 20 cigarrillos diarios el riesgo se triplica).
  4. Diabetes: EM >120 mg/dl aumenta el riesgo 3,7.
  5. Obesidad.
  6. Valor hematocrito: mayor relación en el caso de las mujeres que en los varones, en relación con la viscosidad e hipercoaguilabilidad.
  7. Ejercicio físico: No está claro contra el sedentarismo y otros hábitos desfavorables, pero también algunas situaciones se desencadenan a raíz del ejercicio.
  8. Factores psicosociales: hábitos tóxicos, costumbres y estrés.
  9. Alteraciones electrocardiográficas, alrededor de la onda T.
  10. Anomalías en la conducción intraventricular: Ectopias ventriculares que suelen asociarse a otras patologías, pero pueden tener un valor predictivo en menores de 30 años.
  11. Disminución de la fracción de eyección (30-40%): Valor muy predictivo (suele asociarse a otras patologías)
  12. Antecedentes de cardiopatía:
    • En Varones : hipertrofia ventricular izquierda y persistencia de alteraciones de la conducción.
    • En mujeres: Valor más predictivo se centra en el hematocrito.

Etiopatogenia:

Generalmente se debe a trastornos en la generación y/o conducción del impulso:

  1. Fibrilación ventricular: es la causa más frecuente, tanto en estudios de muertes intra como extrahospitalarias.
  2. Taquicardia ventricular.
  3. Bradiarritmias (tanto primarias, como secundarias a proceso final de fibrilación).
  4. Infarto de miocardio con necrosis amplia de tejido sin llegar a provocar arritmias, sino directamente una disociación electromecánica. Inhibición del estímulo simpático.
  5. Otras causas: Embolismo pulmonar, aneurismas, etc.

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