Ecocardiograma de estrés farmacológico
Este procedimiento se hace en sustitución del ecocardiograma de esfuerzo físico, indicándose en personas que no pueden hacer ejercicio en una banda de caminar ni en una bicicleta estática debido a diferentes condiciones de salud. De esta forma, es posible imitar el ejercicio inyectando un medicamento intravenoso (dobutamina) o mediante otros mecanismos detectar problemas de riego coronario (dipiridamol).
Cómo se realiza y cómo prepararse
El paciente debe acudir a la prueba acompañado y en ayunas de al menos 4 horas. Es importante saber que no debe tomar cafeína, teínas o chocolate en las 24 horas previas a la prueba. Se le entregará previamente a la prueba un consentimiento informado que es necesario que firme, si tiene cualquier duda siempre consulte a su cardiólogo.
La preparación para la ecocardiografía de esfuerzo farmacológico es similar a la de la ecocardiografía básica. Además, se le canalizará una vena en la mano o el brazo para administrar la medicación que empezará a una proporción determinada por su peso aumentando hasta que se alcance el ritmo cardiaco límite (determinado por su médico basándose en su edad y su estado físico) o hasta que se alcance la dosis máxima. Durante la prueba se realizará una monitorización continua de su TA y electrocardiograma, además de obtener imágenes de eco. El médico moverá el transductor por su pecho para poder observar todas las zonas y estructuras de su corazón. Si las arterias coronarias del paciente se han estrechado, el bombeo del corazón no se verá normal en el ecocardiograma. Durante la prueba el paciente puede notar como se acelera su corazón y late más fuerte; algunos pacientes pueden notar algo de dolor de cabeza, sensación de calor, nerviosismo y náuseas, estos efectos secundarios desaparecen nada más terminar de infundir el fármaco.